Magnetoterapia

Técnica/Terapia regenerativa  y antinflamatoria

Los campos magnéticos de baja frecuencia generan unos potentes cambios químicos que son aplicables desde el punto de vista fisioterapéutico.

  • El movimiento inducido de sustancias ionizadas en disolución: La aplicación de los campos magnéticos permite movilizar y provocar cambios en profundidad allá donde se localizan los iones en nuestro cuerpo que se encuentran en nuestro torrente sanguíneo, en el plasma o en los diferentes tejidos del cuerpo humano. Estos cambios, que pueden parecer una cosa insignificante, no se consiguen alcanzar con otras técnicas ya que no existen otros equipos que penetren con intensidad y eficacia en zonas alejadas de la superficie del cuerpo.
  • Regeneración acelerada del tejido óseo:Se produce gracias a la acción sobre las células generadoras de hueso.
  • Se facilita el efecto trófico, es decir, al mejorar el riego sanguíneo en la zona tratada, mejora la absorción de nutrientes y se favorece la recuperación. Por lo tanto, los tejidos eliminarán más rápido las sustancias tóxicas y se alimentarán y oxigenarán de una forma más eficaz.
  • Normalización de la bomba sodio potasio: Con la aplicación de los campos magnéticos se produce un aumento del metabolismo que origina la estabilización de la bomba sodio-potasio del organismo.

En definitiva, los campos magnéticos originan en los tejidos vivos corrientes eléctricas inducidas que suponen una acción clara y manifiesta sobre los procesos de alimentación celular.  A través de estos cambios, podemos conseguir los siguientes efectos:

  • Efecto analgésico
  • Efecto antiinflamatorio
  • Efecto sobre la regeneración de tejido óseo
  • Efecto relajante de la musculatura